Instalación de una Cubierta Etna en Sevilla
En muchas ocasiones, es mejor valorar la funcionalidad que una estética deslumbrante. En el siguiente caso, podemos afirmar esta frase.
Nos encontramos con una piscina de pocos años instalada en el medio de la finca de una segunda vivienda, utilizada para descansar los fines de semana después del continuo ajetreo diario.
El entorno que rodeaba la piscina eran árboles y tierra, los cuales hacen que se ensucie constantemente el agua de la piscina. Nuestros clientes estaban cansados de ser esclavos de su piscina. Lo que al principio era una inversión para disfrutar en familia, acabó siendo un verdadero gasto.
Por esta situación nuestros clientes se ponen en contacto con nosotros.
Sin lugar a dudas entre nuestro extenso de catálogo de cubierta de piscinas, la cubierta que mejor encaja era el modelo Etna. Una cubierta única en el mercado y con una máxima funcionalidad. Su estructura es fija, quedando anclada al suelo.
La apertura de hasta 4 metros de todos sus techos nos permiten disfrutar del baño con vistas al cielo, incluso en los días de más viento gracias a su estructura curva evitando la entrada de aire y de suciedad al interior. También destacar sus puertas perimetrales deslizantes, logrando una mayor visibilidad el entorno.
El color de la estructura elegida es blanco y el acristalamiento es de policarbonato celular de 10mm el cual tiene una cámara interior lo que permite el acceso de calor al interior de la cubierta, pero evita la pérdida de este. Además, cuenta con protección UV a doble cara filtrando la proyección de los rayos solares y alargando de manera notable la duración del mismo.
Finalmente, nuestros clientes quedan realmente contentos con su cubierta de piscinas después de lograr el objetivo de que disfruten de una vez por todas de su piscina.