¿Cuánto debe durar una celda del clorador salino? La respuesta realmente depende de las condiciones de uso y de la frecuencia con la que realice el mantenimiento de su piscina. Pero una respuesta segura es que suelen durar entre cinco y siete años.
Las celdas de sal tienes un coste entre 200€ y 900€, según el modelo de su clorador salino. Veremos más detalles a lo largo de esta publicación de blog.
Esta guía analizará tres cosas principales que debes saber sobre las celdas del clorador salino.
Su clorador salino es una planta de fabricación de cloro en miniatura. La acción del agua salada al pasar por la celda de sal provoca la electrólisis, creando cloro (hipoclorito de sodio), que luego se devuelve a la piscina.
La manera más fácil de estar seguro de que el clorador está funcionando es asegurarse de que la celda esté limpia revisando la aguja o las luces de producción en la caja del clorador. Al estar en funcionamiento, también deberías ver burbujas (gas de hipoclorito) dentro de la cámara, produciendo lo que parece ser agua turbia: ¡eso es cloro que se está creando!
Consejo: recuerda que menos sal = menos cloro, así que asegúrate de verificar primero los niveles de sal.
En el nivel más básico, debería haber burbujas o silbidos provenientes de la propia celda de sal. Debe ser un burbujeo vigoroso. Si el burbujeo suena débil, es posible que su celda se esté acercando al final de su vida útil o que algo ande mal.
Las celdas de sal generalmente están clasificadas para durar 10,000 horas de tiempo de ejecución o alrededor de cinco años de uso.
Hay varias formas de comprobar si la celda del clorador salino de tu piscina está funcionando correctamente:
1. Comprueba los niveles de cloro: Si la celda del clorador salino está funcionando correctamente, deberías ver un aumento en los niveles de cloro en tu piscina. Puedes usar un kit de prueba de cloro para medir los niveles de cloro en el agua.
2. Verifica el caudal de agua: El caudal de agua a través de la celda del clorador salino es importante para asegurar que la electrólisis esté funcionando correctamente. Si el caudal de agua es bajo, es posible que la celda no esté produciendo suficiente cloro. Si es alto, puede haber problemas con la celda.
3. Inspecciona visualmente la celda: Deberías inspeccionar visualmente la celda del clorador salino para ver si hay acumulación de depósitos de sal o calcio, los cuales pueden reducir su eficiencia. Si ves acumulaciones, puedes limpiar la celda con una solución de ácido muriático y agua.
4. Verifica la luz indicadora: Muchas celdas del clorador salino tienen una luz indicadora que muestra si la celda está funcionando correctamente. Si la luz indicadora está apagada o parpadeando, es posible que haya un problema con la celda.
Si después de realizar estas comprobaciones todavía tienes dudas acerca de si tu celda del clorador salino está funcionando correctamente, es posible que desees contactar a un profesional de piscinas para que la revise.
La celda de sal es alimentada por el panel de control . Si el panel de control no tiene luces indicadoras, es una buena señal de que no hay energía. Muchos cloradores de sal también tienen un fusible dentro del gabinete que está diseñado para fundirse en caso de sobrecarga de energía o caída de un rayo y así proteger la instalación.
La celda de sal necesita una cierta cantidad de flujo de agua para funcionar de manera efectiva. Las tasas de flujo pueden reducirse por una bomba obstruida o una canasta de skimmer , un filtro sucio o válvulas direccionales cerradas
La celda del clorador salino necesita una cierta cantidad de sal en el agua para poder convertir el agua salada en cloro. Cada celda de sal está calibrada para trabajar dentro de un cierto rango de salinidad, generalmente alrededor de 4000 ppm. La mayoría de los cloradores de sal usan un sensor de sal y muestran el nivel de sal medido o tienen una luz indicadora o un código de error para avisarle cuando el nivel de sal cae por debajo del umbral mínimo.
Su pH, alcalinidad y dureza de calcio deben estar dentro del rango para que el cloro creado tenga la eficiencia óptima o el poder de matar. Un pH bajo puede acelerar la actividad del cloro, quemándolo más rápidamente, mientras que un pH alto puede reducir la actividad, haciendo que el cloro sea lento y menos eficaz. Puede probar estos niveles de agua usted mismo usando un kit de prueba 5 en 1 o tiras reactivas 7 en 1.
La celda de sal debe limpiarse regularmente para eliminar los depósitos de calcio que ralentizan el flujo de agua y cierran el espacio entre las placas de metal, evitando que ocurra la electrólisis. La mayoría de los cloradores se autolimpian al invertir la polaridad en las placas de metal para eliminar el calcio acumulado. Sin embargo, incluso las celdas de autolimpieza necesitan una inspección periódica y, quizás, una limpieza ocasional. Puede limpiar las células dándoles un ‘baño ácido’, que generalmente consiste en una proporción de 90 % de agua por 10 % de ácido, y ‘cepillando’ los depósitos de calcio con un cepillo de dientes. El ácido devorará las placas con el tiempo suficiente, así que asegúrese de bañar la celda durante no más de 10 minutos.
1. Se ve peor por el uso, ha perdido algunas placas y los baños de ácido simplemente no funcionan.
2. Su piscina está comenzando a ponerse verde o turbia, a pesar de que su clorador está al 100%.
3. Su clorador muestra constantemente “poco en sal”, aunque haya agregado sal a la piscina
El clorador salino es un dispositivo utilizado en las piscinas para producir cloro a partir de la sal que se añade al agua de la piscina. Esto elimina la necesidad de agregar cloro líquido o tabletas al agua de la piscina. El clorador salino se compone de varias partes, incluyendo la celda de electrólisis, el controlador, la fuente de alimentación y el sensor de flujo. Cada uno de estos componentes desempeña un papel importante en la generación de cloro a partir de la sal y en la monitorización del proceso para asegurar su correcto funcionamiento. En conjunto, el clorador salino es una solución conveniente y eficaz para mantener el agua de la piscina limpia y clara.
La duración de una celda del clorador salino depende de varios factores, como la calidad de la celda, el uso y mantenimiento adecuados y la calidad del agua de la piscina. En general, una celda del clorador salino bien cuidada y de alta calidad debería durar entre 3 y 7 años antes de necesitar ser reemplazada. Sin embargo, es importante tener en cuenta que algunos factores pueden reducir la vida útil de la celda, como el uso excesivo de la piscina, la acumulación de depósitos de sal o calcio en la celda, o la exposición a condiciones climáticas extremas. Por lo tanto, es importante seguir las recomendaciones del fabricante y mantener la celda del clorador salino adecuadamente para prolongar su vida útil y garantizar su correcto funcionamiento.
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